Un nuevo informe muestra cómo utilizar los Objetivos de Desarrollo Sostenible para una mejor reconstrucción después del Covid-19
El pasado 30 de junio de 2020 se publicó el Informe de Desarrollo Sostenible (SDR, por sus siglas en inglés) 2020, que incluye el Índice ODS y los Cuadros de Mando. Fue escrito por el autor principal Jeffrey Sachs y un equipo de expertos independientes que trabajan en la Red de Soluciones para el Desarrollo Sostenible (SDSN) y en la Bertelsmann Stiftung, y publicado por Cambridge University Press. Los Objetivos de Desarrollo Sostenible son más necesarios que nunca. Sus principios fundamentales de inclusión social, acceso universal a los servicios públicos y cooperación mundial son las pautas para la lucha contra el Covid-19, así como para la recuperación impulsada por las inversiones que el mundo debería adoptar para superar la crisis económica causada por la pandemia. El informe de este año se centra en la lucha a corto plazo para detener el Covid-19 -subrayando la importancia de las estrategias de salud pública- y en las transformaciones a largo plazo para guiar la fase de recuperación. Como muestra el informe, hubo un claro progreso de los ODS antes de la pandemia de este año.Con políticas sólidas y una fuerte cooperación mundial, podemos restaurar ese progreso en la próxima década", dice Jeffrey D. Sachs, Director de la SDSN y primer autor del informe. El informe esboza los probables impactos a corto plazo que tendría el Covid-19 en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y describe cómo éstos pueden enmarcar la recuperación. El documento también hace un seguimiento del progreso de los países hacia los ODS. Desde su lanzamiento en 2016, este informe anual ha proporcionado los datos más actualizados para rastrear y clasificar el desempeño de todos los estados miembros de las Naciones Unidas en los ODS. Como una herramienta de monitoreo no oficial, el SDR es complementario a los esfuerzos oficiales para monitorear los ODS.
Aprendiendo las lecciones: Entre los países de la OCDE, Corea del Sur fue el que pudo abordar de mejor manera los efectos del Covid-19 en la salud y, al mismo tiempo, mitigar los efectos en la economía
En el informe se analiza la forma en que los gobiernos han respondido a la crisis sanitaria inmediata y se describen las lecciones emergentes para las autoridades de salud pública,
los gobiernos y el público en general. La crisis ha puesto de manifiesto profundas deficiencias en los sistemas de salud pública, incluso en muchos de los países más ricos que se consideraban bien preparados para una pandemia de este tipo. Entre tanto, algunos países, en particular de la región de Asia y el Pacífico, han logrado (hasta ahora) contener el Covid-19 y reducir al mínimo los daños a sus economías. En el informe se presenta un enfoque novedoso y un índice experimental para la eficacia de la respuesta temprana de los países al Covid-19 en 33 países de la OCDE, que integra consideraciones sanitarias y económicas. En general, Corea del Sur encabeza este nuevo índice, seguida de los países bálticos y los de la región de Asia y el Pacífico. En cambio, los países de Europa occidental y los Estados Unidos tuvieron menos éxito en la mitigación de los efectos sanitarios y económicos del Covid-19. Los cierres estrictos y prolongados, aunque costosos, fue muy probablemente la respuesta de política correcta para los países que carecen de equipo personal de protección (por ejemplo, máscaras) y tienen una menor capacidad de pruebas y de cuidados intensivos hospitalarios. Los cierres estrictos y prolongados contribuyeron a salvar muchos miles de vidas (Flaxman et al, 2020).
Seis transformaciones del SDG para apoyar una recuperación sostenible y justa
El informe concluye que entre 2015 y 2019, la comunidad mundial hizo progresos significativos en torno a los ODS. Los progresos varían según los ODS, las regiones y los
países. Como en años anteriores, el Índice de ODS está encabezado por tres países nórdicos: Suecia, Dinamarca y Finlandia. Sin embargo, incluso estos países se enfrentan
a importantes desafíos para alcanzar al menos uno de los objetivos. Ningún país está en camino de alcanzarlos todos. Es probable que el Covid-19 tenga severos impactos negativos a corto plazo en la mayoría de los ODS. En particular en el ODS 1 (No Pobreza), ODS 2 (No Hambre), ODS 3 (Buena Salud y Bienestar) y ODS 8 (Trabajo Decente y Crecimiento Económico). El Covid-19 amplifica gravemente las desigualdades de ingresos y otras formas de desigualdad. Los puntos brillantes de un cuadro premonitorio son los reducidos impactos
ambientales como resultado de la disminución de la actividad económica. Un objetivo clave es restaurar la actividad económica sin, simplemente, restaurar los viejos patrones de degradación ambiental.
Los ODS y las Seis Transformaciones ODS deberían guiar la recuperación de Covid-19 y ayudar a reconstruir de mejor manera. Ningún país estará a salvo de la pandemia a
menos que todos los países pongan el virus bajo control. El informe presenta un marco detallado de cómo los países pueden realizar una mejor reconstrucción utilizando los ODS.
La urgente necesidad de más (¡no menos!) asociaciones y colaboración mundial (ODS 17)
La crisis actual – incluidas las hostilidades entre las principales potencias – plantea el espectro de un conflicto mundial en lugar de una cooperación mundial. La buena noticia es que la mayor parte del mundo quiere urgentemente el multilateralismo y la cooperación. La mala noticia es que algunos países no lo desean, mientras que otros están paralizados por sus propias crisis, déficits presupuestarios y divisiones de la política local. Por lo tanto, la situación multilateral es tensa y necesita ser reforzada. La cooperación internacional, cubierta por el ODS 17 (Asociaciones para los Objetivos), puede acelerar una resolución favorable y rápida de la epidemia. De hecho, no hay otra manera de tener éxito. En el informe se identifican cinco medidas clave que la cooperación mundial debería incluir:
- Difundir rápidamente las mejores prácticas.
- Fortalecer los mecanismos de financiación para los países en desarrollo.
- Abordar los focos de hambre.
- Asegurar la protección social.
- Promover nuevos medicamentos y vacunas.
Otras conclusiones del Informe sobre el Desarrollo Sostenible 2020
Desde su adopción en 2015, Asia oriental y meridional es la región que más ha progresado en los ODS. A nivel de los países, destacan Côte de Ivoire, Burkina Faso y Camboya. En cambio, Venezuela, Zimbabwe y la República Democrática del Congo fueron los que más retrocedieron debido a los conflictos y otras razones económicas y sociales.
Los países de altos ingresos generan importantes repercusiones transfronterizas que se plasman en el comercio y el consumo y que socavan la capacidad de otros países para
alcanzar los ODS. Por primera vez, también se presentan tendencias a lo largo del tiempo: la deforestación y las amenazas a la biodiversidad causadas por las cadenas de
suministro insostenibles aumentan la probabilidad de que se produzcan epidemias en el futuro.
A pesar de la retórica política, son pocos los países que han integrado de manera significativa los ODS en las prácticas y procedimientos de gestión pública, incluidos los presupuestos nacionales. En particular, teniendo en cuenta su tamaño e importancia en la economía y el comercio mundiales, los países del Grupo de los 20 deberían intensificar
los esfuerzos y las medidas de política en relación con los ODS.
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